Courting Curves - Varios Autores
Mi maldito pie de plomo me va a llevar a la cárcel. Desde
que me mudé a esta pequeña ciudad de Texas, me han puesto cuatro multas por
exceso de velocidad y el sheriff está harto de ponerme multas, harto de tratar
conmigo. Para conservar mi licencia, tengo que presentarme ante un viejo juez
gruñón y convencerlo de que por fin he aprendido la lección. Uf.
Me llevo el susto de mi vida cuando descubro que el juez no es gruñón ni viejo y estoy bastante segura de que su mirada acalorada no es todo ira por mi falta de respeto a la ley.